Viaje privado a Gerona desde Barcelona
PEPE TOURS
Viaje privado a Gerona desde Barcelona
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Excursión privada a Girona desde Barcelona
Excursión privada a Girona con salida desde Barcelona. Enclavada en el valle del Ter, en la confluencia de cuatro ríos, encontramos a la ciudad histórica de Girona, una de las más interesantes de Cataluña, que nos permite recorrer más de dos mil años de historia mientras paseamos por su casco histórico. Déjese llevar por un experto guía local, gran conocedor de la historia y arquitectura local que les brindará una experiencia inolvidable.
Le proponemos una excursión privada a Gerona, acompañados de guías oficiales de turismo que explicarán la historia de Girona, sus monumentos, características y costumbres. El viaje se realizará en vehículo privado, con todas las comodidades, con conductor privado experimentado gran conocedor de las rutas. A la hora indicada, salida desde Barcelona con destino Girona. A la llegada les estará esperando su guía privado para comenzar una visita turística de la ciudad, descubriendo los monumentos más significativos y los lugares de interés de Girona.
Pasear por Girona es pasear por su historia. La llamada “Ciudad de los Cuatro Ríos”, nos muestra un casco histórico dominado por construcciones medievales y reminiscencias romanas, árabes y hebreas. La visita privada de Girona comienza en el Puente de San Félix que da acceso a la ciudad histórica de Gerona. Desde el mismo puente veremos el imponente campanario de la Basílica de Sant Feliu, uno de los edificios góticos más representativos de la ciudad y la que fuera primera catedral de Girona. Cruzando el Portal de Sobreportes, la puerta norte de la Gerunda romana se nos desvela la Plaza de la Catedral presidida por el templo religioso más importante de la ciudad. Subiendo la monumental escalinata barroca visitamos la Catedral de Santa María de Gracia que posee la nave gótica más ancha de la arquitectura medieval europea. En su interior se conserva una de las joyas textiles del románico catalán, el Tapiz de la Creación.
Continuamos por el Carrer de la Força, eje central de la abigarrada judería de Girona (conocida como el Call), es una de las juderías mejor conservadas de España, un laberinto de estrechos callejones y de patios que mantienen el aura de los tiempos medievales. Subiendo por la Pujada de Sant Domènec, veremos la Universidad, el convento de Sant Domènec y las murallas, que ofrecen unas inmejorables vistas de la ciudad. Desde aquí nos dirigimos a la ribera del Río Onyar, conociendo sus puentes que nos ofrecen una vista emblemática de las casas pintadas con colores vivos asomadas al río, la imagen más reconocida de Girona. Desde aquí, pasando por la Rambla de la Llibertat, llegamos a la Plaza del Vi, donde se asienta el Ayuntamiento de Girona y el Teatro Municipal. La visita privada de Gerona termina en la Plaza de Catalunya, un espacio abierto edificado sobre el río Onyar.
Al finalizar la visita, disfrutarán de tiempo libre para comer y seguir explorando a su aire la ciudad, rememorando detalles de la visita privada realizada. Posteriormente, nuestro conductor privado les esperará para llevarlos de vuelta a su hotel en Barcelona. Llegada y fin de los servicios.
Informaciones sobre Girona:
El núcleo antiguo de esta urbe catalana conserva huellas de su larga historia, desde que fuera fundada por los romanos en el siglo I a. C. En la ciudad antigua podemos identificar dos recintos fortificados, bien definidos, que corresponden con distintas etapas de su historia: la Força Vella, de la época romana y el ensanche medieval, que data de los siglos XIV y XV. Además, el atractivo de Girona se completa con la sugerente judería, o call, las bellísimas calles y plazas porticadas, los exultantes espacios barrocos y las construcciones novecentistas de Rafael Masó.
Força Vella. En el siglo I a.C., los romanos levantaron una poderosa fortaleza que trazaba un perímetro casi triangular; una especie de acrópolis, la Força Vella, muy bien protegida por muros construidos a base de grandes sillares de piedra. Fue el primer recinto de la ciudad, inalterado hasta el año 1000 y perceptible aún hoy en algunos paramentos de las murallas.
El ensanche medieval. La ciudad medieval se fue configurando entre los siglos XI y XV con nuevos barrios surgidos en torno a la Força Vella: al norte, los de Sant Feliu y Sant Pere, al sur el Areny y la Vilanova, y al oeste, el Mercadal, protegidos con nuevas murallas. La ampliación de las murallas romanas en época medieval permite hoy día pasear por el antiguo camino de ronda y recorrer los tramos de muralla carolingia más extensos de Europa (s. IX). Las diversas torres que la jalonan son auténticos miradores privilegiados sobre la ciudad y sus alrededores.
Catedral de Girona. En el lugar más genuino de la Força Vella se alza la catedral. Construida entre los siglos XI y XVIII, se configura a partir de un conjunto de muros y espacios de estilos diferentes, desde el románico (claustro y torre de Carlomagno) hasta el Barroco de la fachada y la escalinata. Su elemento más singular es la gran nave (s. XV-XVI), que constituye el espacio gótico abovedado más ancho del mundo (23 metros). Para llegar hasta la portada principal hay que ascender por una gran escalinata de finales del siglo XVII. La fachada principal es barroca, mientras que el claustro es del siglo XII, la torre campanario del XI y el resto del edificio del XIV. El claustro es de grandes dimensiones con planta trapezoidal determinada por la muralla que tiene adosada. En el interior se conservan obras de gran belleza y valor. El retablo del altar mayor de plata, esmaltes y pedrería, es una de las joyas de la orfebrería española. Los capiteles del claustro tienen escenas del Antiguo y Nuevo Testamento. El tapiz de la Creación es una importante pieza de tapicería románica. También se conserva un Beato de Liébana.
La basílica de Sant Feliu. La que fuera primera catedral de Girona, papel que desempeñó hasta el siglo X, es uno de los edificios góticos más representativos de la ciudad, sobre todo por su esbelto campanario (s. XIV-XVI). De aspecto acastillado, la cabecera románica se completó con las naves góticas y la fachada barroca (s. XIII-XVIII). Su interior conserva destacadas obras de arte, como los ocho sarcófagos paganos y paleocristianos (s. IV) y el Cristo yacente (s. XIV) del maestro Aloi.
El barrio judío. El Call. Una de las áreas más emblemáticas de la Força Vella es el call, formado por un laberinto de estrechos callejones y de patios que mantienen el aura de los tiempos medievales. Se trata de una de las juderías mejor conservadas del mundo y una muestra evidente de la importancia que tuvo la cultura judía en Girona.
Casas del Onyar. Ciudad bastida en piedra, ofrece espectaculares imágenes de plazas porticadas y callejones empinados. Destacamos especialmente las casas del Onyar (el río que cruza la ciudad) pintadas con colores vivos y que, con la Catedral y Sant Feliu al fondo constituyen la imagen más emblemática de Girona.
Puentes de Girona. El Barrio Viejo y el Barrio del Mercadal de Girona están separados por el río Onyar. Este factor ha provocado que históricamente haya sido muy importante el papel de los puentes en la comunicación entre los dos principales ejes de la ciudad. Estas construcciones han acabado convirtiéndose en un importante referente arquitectónico para la población. Los más representativos son: Puente de Piedra o Puente de Isabel II, se construyó durante el reinado de Isabel II, Puente Eiffel o Puente de les Peixateries Velles, diseñado por Gustave Eiffel, es el puente más transitado ya que une la Ramba con la calle Santa Clara, Puente de San Agustín que ofrece las mejores vistas de las casas del rio, Puente de la princesa o Puente de Gómez.
La plaza del Vi. Espacio muy concurrido delimitado por soportales, por el denominado Palacio del General, edificio gótico-renacentista que fue la sede de la administración de la Generalitat en las tierras de Girona durante los siglos XVI y XVII, y por el Ayuntamiento y el Teatro Municipal, destacado coliseo ochocentista entre los más interesantes de Cataluña.
La Rambla de la Llibertat. Urbanizada en el siglo XIII para la celebración del mercado, la Rambla es un magnífico espacio alargado paralelo al río Onyar cuyo elemento más característico son los soportales, de techos bajos y arcadas desiguales, y que ha sido desde antiguo el principal centro comercial y de ocio de Girona. En la Rambla se concentran varios edificios de interés, como la Casa Norat (1912), con una notable fachada modernista.
Observaciones
Pepe Tours se reserva el derecho de alterar y modificar el itinerario y el orden de las visitas por razones organizativas. Recomendamos llevar calzado y ropa cómoda, botella de agua y protector solar si usted lo ve necesario.